
Sistemas de surtido de pedidos: el corazón tecnológico de almacenes y centros de distribución
La velocidad y la precisión marcan la diferencia en un entorno logístico, por eso los sistemas de surtido de pedidos (o order picking systems) se han convertido en el motor operativo de almacenes y centros de distribución modernos. Más allá de un simple proceso de selección de productos, el surtido es una tarea crítica que requiere equipamiento especializado para garantizar eficiencia, trazabilidad y escalabilidad. A continuación, exploramos los principales tipos de equipamiento necesarios para implementar un sistema de surtido robusto.
Equipamiento esencial para un sistema de surtido eficiente
Estantería y sistemas de almacenamiento optimizados. El surtido comienza con una correcta disposición. Los racks selectivos, estanterías dinámicas (tipo carton flow) y sistemas modulares permiten una organización lógica de productos, facilitando el acceso rápido y minimizando desplazamientos.
Transportadores y sistemas de flujo automatizado. Bandas transportadoras, rodillos motorizados o transportadores por gravedad permiten mover productos entre zonas de picking sin necesidad de desplazamientos manuales, reduciendo tiempos y esfuerzo físico.
Dispositivos de picking asistido por tecnología (Pick-to-Light / Put-to-Light). Estos sistemas visuales indican al operario qué producto tomar y en qué cantidad, mediante luces colocadas en los estantes. Son ideales para zonas de alta rotación y reducen los errores de surtido.
Equipos móviles de recolección. Carros de picking ergonómicos, montacargas tipo order picker, plataformas elevadoras y equipos auxiliares de almacén permiten alcanzar diferentes niveles de estantería y trasladar varios pedidos simultáneamente.
Terminales portátiles y lectores de códigos de barras (RF). Las terminales inalámbricas con escáner permiten validar productos en tiempo real, asegurar la correcta identificación de SKU y registrar cada acción del operario.
Software de gestión de almacenes WMS. Aunque no es físico, el software es el cerebro que organiza las rutas de picking, asigna tareas, controla el inventario y coordina los recursos materiales y humanos. Es imprescindible para escalar operaciones y mantener trazabilidad.
Invertir en el equipamiento adecuado no solo mejora la productividad del surtido de pedidos, sino que optimiza todo el flujo de trabajo logístico. Desde estanterías bien diseñadas hasta software y automatización, cada componente del sistema debe alinearse con el volumen de operaciones, el tipo de productos y los tiempos de respuesta requeridos. La tecnología es la clave para transformar un almacén tradicional en un centro de distribución competitivo y orientado al cliente.